En la última semana se registró un incremento del 50% de los contagios. Por ahora, los expertos coincidieron en que la situación “no es alarmante” ni por la cantidad ni por la gravedad de los cuadros clínicos. Cómo impactan las bajas tasas de vacunación
El último reporte semanal emitido por el Ministerio de Salud de la Nación dio cuenta de una nueva suba en los casos de COVID-19 en el país. Según las cifras oficiales difundidas ayer, los nuevos contagios pasaron de 2.206 en la semana del 13 al 20 de noviembre a 3.323 entre el 20 y el 27, lo que representa una suba de 50,63%. Las víctimas fatales, en tanto, habían sido seis en el parte de hace siete días mientras que ayer contabilizaron ocho.
Si bien el número de casos es mucho menor a los que se registraban en los peores momentos de la pandemia en el país, lo que encendió las alarmas de las autoridades sanitarias es el porcentaje del incremento de los nuevos contagios en siete días. Las subas son significativas pero, por el momento, los expertos no anticipan una nueva ola de contagios como la que el mundo vivió en diciembre de 2021, cuando la variante Ómicron se propagó rápidamente a nivel global, provocando cientos de miles de casos en cada país.
No obstante, estos casi tres años de pandemia nos han enseñado que la circulación del SARS-CoV-2 y su constante evolución es un fenómeno dinámico, por lo que el escenario puede cambiar.
“La razón del aumento actual es que el virus sigue circulando y en el mundo se están registrando picos, que lógicamente no tienen la misma magnitud que las olas anteriores”, dijo a Infobae el médico infectólogo Ricardo Teijeiro (MN 58065), quien amplió: “Hace 15 ó 20 días teníamos de 250 a 300 casos por día y pasamos a tener 500 casos diarios, pero recordemos que hemos llegado a tener 150.000 contagios diarios, o sea que este aumento no es significativo”.
El especialista del servicio de Infectología del Hospital Pirovano de la Ciudad de Buenos Aires analizó que “esta situación depende mucho también de la cantidad de gente que no se volvió a vacunar, ya que sus anticuerpos van cayendo”.
“La cantidad de personas que tiene su dosis de refuerzo al día es muy baja, estamos en un 20% a 30% de la gente que siguió dándose refuerzos, ahí tenemos que insistir”, sostuvo Teijeiro.
Por su parte, el médico infectólogo Roberto Debbag (MN 60253) opinó que “el aumento de casos se está viendo en varios países y la causa son las nuevas subvariantes circulantes derivadas de Ómicron B5″. “No se puede hablar de un rebrote pandémico, más bien se trata de la circulación normal de un virus pandémico que produce estas epidemias”, observó el experto ante la consulta de Infobae.
“Lo que se sabe es que para prevenir las infecciones de las variantes derivadas de Ómicron las dosis de las vacunas originales que más impactan en la inmunidad son la tercera y la cuarta, y en la Argentina el 30% de la población no recibió la tercera y el 50% no recibió la cuarta dosis, o sea que hay un grupo importante de personas que podrían no estar protegidas contra estas subvariantes y que deberían vacunarse con tercera y cuarta dosis”, señaló Debbag.
El presidente de la Sociedad Latinoamericana Infectología Pediátrica apuntó: “Las nuevas vacunas bivalentes deberían empezar a darse, pero en el país todavía hay mucho stock de las dosis anteriores y allí seguramente se explique el retraso en la llegada de estas nuevas vacunas más eficaces contra las variantes circulantes”.
ico infectólogo Lautaro De Vedia (MN 70640), “hay un aumento de casos, todavía sutil. Se está testeando poco, los casos son leves, muchos no pasan de un resfrío”, describió el cuadro de situación el experto del Hospital Muñiz y ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (Sadi), quien resaltó que “como se dice ya desde hace un tiempo las variantes son menos agresivas y las vacunas con que cuenta la población hacen que la situación sea menos dramática”.
“Las razones son difíciles de establecer -analizó De Vedia-. Los virus son así; si uno toma las estadísticas, se sabe que cuando hay presencia de virus respiratorios van subiendo su circulación por temporadas. Puede además en este caso haber subvariantes que no sean bien cubiertas por las vacunas, por eso estamos a la espera de mejores vacunas (las que tenemos fueron extraordinarias en su momento pero falta para cubrir a las nuevas subvariantes)”.
Y tras asegurar que la situación “no va a volver a ser lo que fue en 2020 y 2021, ya que no se compara la cantidad ni la gravedad de los casos que se están viendo”, el especialista resaltó: “En medicina y en infectología hay que ser dinámicos en los conceptos; hoy aparece un caso y no necesariamente hay que aislar a todo el mundo, la situación no es ni va a volver a ser la que vivimos en estos últimos dos años”.
En la misma línea, la médica infectóloga María Cecilia Niccodemi (MN 105624) sostuvo que “las razones (de la suba de casos) son múltiples”. “Primero porque la gente va perdiendo la protección generada por las vacunas, por otro lado, obviamente la vida ya normal hace que aumente la circulación viral -analizó-. Y en tercer lugar, la respuesta inmunológica frente a las variantes Ómicron es menor que a la cepa original, se sabe que prácticamente 60%, con lo cual sin duda hay una pérdida de la inmunidad porque las vacunas que se aplican en el país tienen menos protección frente a la variante que está circulando”.
La especialista del staff del Centro Médico Doctor Stamboulian y Sanatorio La Trinidad San Isidro sostuvo que “en los EEUU ya están dando la vacuna bivalente que tiene la cepa original más Ómicron”, y consideró que “es muy precoz para hablar de una nueva ola”.
“No estamos en esa situación; tenemos que ver con el transcurso de los días cómo evoluciona la circulación tanto de este virus como de los otros respiratorios que están circulando porque hasta hace pocos días el que predominaba era la gripe”, concluyó.