La Policía Bonaerense detuvo anoche a Miguel Ángel Godoy por el evento que planificaron el sábado pasado, cuando hubo 300 personas a las que les cobraron entrada
El sábado pasado, personal de la Dirección de Nocturnidad de Chivilcoy y efectivos de la Policía Bonaerense llegaron hasta una casa de esa localidad a detener una fiesta clandestina con más de 300 personas. La sorpresa fue que uno de los organizadores del evento, Miguel Ángel Godoy, cumplía en esa misma vivienda con arresto domiciliario en una causa por drogas.
Tras ese episodio, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de Mercedes revocó la prisión domiciliaria del hombre de 53 años y ordenó su detención y traslado a una dependencia del Servicio Penitenciario Bonaerense. En las últimas horas, luego de un allanamiento de la Sub DDI de Chivilcoy en la casa de la fiesta, tanto él cómo Miguel Agustín Godoy, de 28 años, quedaron detenidos.
Lo curioso, según confirmaron fuentes del caso a Infobae, es que la causa por estupefacientes que investiga la Ayudantía Fiscal de Mercedes, y por la que tiene la prisión domiciliaria Godoy, se había iniciado justamente en la propiedad donde el sábado el detenido llevó a cabo el evento.
La insólita fiesta ocurrió el sábado en la casa donde Godoy estaba detenido, en las calles Conesa y 508 de esa ciudad, ubicada a poco más de 160 kilómetros de Capital Federal.
Según la información que publicó el portal HoyChivilcoy, en el lugar la música sonaba a alto volumen, había decoración lumínica y un clima de diversión entre los más de 300 invitados, muchos de ellos menores de edad, que para poder ingresar debían exhibir una pulsera que daba cuenta de que habían abonado la entrada.
Tras el allanamiento en su casa, los Godoy quedaron detenidos en una dependencia policial de Chivilcoy, desde la cual serán trasladados a un penal bonaerense en las próximas horas.
Los cuestionamientos al control de las tobilleras electrónicas no son nuevos. El 20 de octubre pasado se conoció que un menor de 16 años que debía cumplir una prisión domiciliaria fue detenido por matar al remisero Gastón Ferreira (45) en el marco de un robo.
El crimen ocurrió en Carlos Casares, entre Isleños y Obligado, en la localidad bonaerense de Laferrere, cuando un ladrón irrumpió en la remisería donde trabajaba Ferreira con la intención de robar un Renault Sandero blanco del chofer que recién había llegado de hacer un viaje. La víctima intentó resistirse y forcejearon: el remisero recibió un tiro mortal en el pecho.
Luego, el ladrón menor de edad se subió al auto y emprendió la fuga de manera inmediata. Pero la Policía, alertada de lo sucedido, dio con el coche de la víctima y, tras una breve persecución, arrestó al sospechoso.
En el interior del auto robado al remisero asesinado se incautó un revolver calibre .38 marca Doberman, con municiones en su tambor y sin numeración. Se sospecha de que esa fue el arma utilizada por el delincuente para asesinar a Ferreira.
Fue la madre del adolescente detenido quien afirmó que su hijo había estado cinco meses en un instituto de menores Lomas de Zamora y que se encontraba cumpliendo un arresto domiciliario por 7 meses a raíz de una condena por otro robo cometido también en Laferrere en la casa de su hermano, de la cual se había escapado.