El proyecto obtuvo dictamen con un amplio acuerdo que incluyó al Frente de Todos, Juntos por el Cambio y el Interbloque Federal. Rechazo de las provincias vitivinícolas. También se debatirá la “Ley Johanna”, contra la violencia obstétrica
Este jueves la Cámara de Diputados retomará la actividad con una sesión donde se debatirá una amplio temario de consenso en el que se destacan el proyecto de alcohol cero al volante y la denominada “Ley Johanna”, contra la violencia obstétrica.
Entre la decena de proyectos que se debatirán mañana no se encuentra ninguno de los que fueron reclamados por la Casa Rosada cuando extendió por decreto las sesiones ordinarias (impuesto a la renta inesperada, promoción de la agroindustria y compre argentino). Tampoco se tratará la moratoria previsional que impulsa el kirchnerismo y ya tiene media sanción del senado.
El proyecto de Alcohol Cero al volante obtuvo dictamen de comisión hace dos semanas tras un acuerdo entre el Frente de Todos, Juntos por el Cambio y el Interbloque Federal. A su vez, el texto fue elaborado en colaboración con el Ministerio de Transporte, junto al Ministerio de Salud, la SEDRONAR y asociaciones de familiares de víctimas de tránsito, que estuvieron presentes durante la reunión.
La iniciativa es rechazada por las provincias vitivinícolas, como Mendoza y San Juan, que plantean alternativas que no incluyen modificaciones en el límite de alcohol en sangre. Por ejemplo, aumentar los controles viales y el presupuesto en campañas de prevención. De hecho, los diputados mendocinos Julio Cobos y Jimena Latorre propusieron mantener el límite de 0,5 gramos por litro de alcohol en sangre, pero aumentando las penalidades para quienes infringen las normas.
La Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), por ejemplo, aseguró que el proyecto no reducirá el número de accidentes y que “afectará las costumbres de los consumidores”.
El proyecto que se tratará en el recinto modifica la Ley de Tránsito 24.449 y estipula que “queda prohibido conducir cualquier tipo de vehículos con una alcoholemia superior a cero miligramos por litro de sangre”. Y agrega: “La autoridad competente realizará el respectivo control mediante el método adecuado aprobado a tal fin por el organismo sanitario”.
La actual Ley de Tránsito 24.449 establece, para cualquier tipo de vehículo, una tolerancia de hasta 500 miligramos (0,5) de alcohol por litro de sangre; para motocicletas o ciclomotores, hasta 200 miligramos (0,2); y para transporte de pasajeros de menores y de carga, alcohol cero.
La “tolerancia cero” con el alcohol ya se implementa en siete provincias y 13 localidades del país, donde se obtuvieron mejores resultados que la normativa actual que permite el 0,5 de alcohol en sangre.
Por otro lado, la denominada “Ley Johanna”, apunta a fijar los procedimientos médico-asistenciales para la atención de mujeres y personas gestantes frente a la muerte perinatal. Es decir, cuando se produce entre la semana 22 hasta 7 días después del nacimiento.
El proyecto había recibido dictamen el año pasado, pero, como consecuencia del recambio legislativo, perdió estado parlamentario.
“Las mujeres y personas gestantes tendrán derecho a recibir información suficiente y adecuada; un trato respetuoso, individual y personalizado; tomar contacto con el cuerpo sin vida, teniendo la opción de hacerlo acompañadas por un psicólogo; tomar conocimiento fehaciente de las causas que originaron el deceso; recibir información sobre lactancia, métodos de inhibición y/o donación de ésta”, plantea uno de sus artículos.
El proyecto fue bautizado así por el caso de Johanna Piferrer, quien perdió un embarazo en la semana 33 y luego denunció ser víctima de violencia obstétrica. Este concepto se refiere a la asimetría de poder basada en el saber entre el profesional de la salud y la persona gestante. La paciente, entonces, tiene que acatar y someterse a ese saber/poder y suelen generarse prácticas que no tienen en cuenta sus necesidades ni comodidades y que constituyen maltratos.
Otro de los temas que se incluyó en la convocatoria es la iniciativa que reconoce a la Lengua de Señas Argentina (LSA) como una lengua natural y originaria en todo el territorio de la Nación argentina, reconociendo la importancia de su preservación y difusión como parte del patrimonio lingüístico y cultural de la comunidad, que cuenta con sanción del Senado y de aprobarse se convertirá en ley.
También figura en el temario el debate del Programa de Protección Integral de Personas con Cardiopatía Congénita que busca incorporar como estudio de rutina obligatorio para todas las mujeres embarazadas o personas gestantes como primer nivel de detección la evaluación cardíaca fetal, así como su incorporación al Programa Médico Obligatorio (PMO).
Asimismo, se incluyó un proyecto impulsado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Humano para modificar la Ley de Residuos Peligrosos sancionada en 1991 y actualizar los valores de las multas -actualmente fijados en australes- mediante la creación de una unidad fija que perdure en el tiempo y sea de fácil aplicación.
Otro de los proyectos que la Cámara baja buscará aprobar el jueves en el recinto es la iniciativa impulsada por el diputado nacional del FdT por San Juan, José Luis Gioja, para establecer que el feriado nacional del 17 de agosto, día del paso a la inmortalidad del Padre de la Patria, general don José de San Martín, no sea trasladable.
Por último, se incluyeron además un conjunto de proyectos que establecen la transferencia a título gratuito de inmuebles del Estado a diferentes municipios del país.