El francomarroquí Salah Abdeslam, único terrorista sobreviviente habló por primera vez desde su detención en 2016.
Francia inició este miércoles un maratónico juicio sobre uno de los ataques terroristas más sangrientos en su suelo, seis años después de una noche de horror en París en noviembre de 2015 que dejó 130 muertos y un solo atacante con vida.
París amaneció en alerta máxima por temor a un nuevo atentado. Sus calles está vacías pero también bloqueadas frente a un juicio histórico que arrancó pasado el mediodía francés con una sorpresa.
El francomarroquí Salah Abdeslam, el principal acusado por las matanzas y único sobreviviente de los ataques, rompió el silencio por primera vez desde que fue detenido en Bélgica en 2016.
“Primero me gustaría testificar que no hay otra deidad que Alá y que Mahoma es su mensajero”. Jean-Louis Périès truncó esta intervención replicando: “Eso lo veremos más adelante”.
Luego aceptó su identidad pero se negó a dar los nombres de sus padres. “Los nombres de mi padre y mi madre no tienen nada que ver aquí”, respondió.
Finalmente, cuando se le preguntó sobre su profesión, como a todos los acusados, Salah Abdeslam dijo que había “abandonado” su profesión “para convertirse en un luchador del Estado Islámico“.
Los abogados de Salah Abdeslam llegan al tribunal. Foto: EFE
Los ataques ocurrieron del 13 de noviembre en el Estadio de Francia, al norte de París, en las terrazas del este de la capital y en la sala de conciertos Bataclan.
“Un juicio histórico”, “un juicio fuera de lo común”, “nueve meses para comprender”, “nueve meses para juzgar el terror”… La prensa francesa era unánime sobre el proceso de los ataques revindicados por el grupo ISIS.
“Es un salto a lo desconocido”, estima Arthur Dénouveaux, sobreviviente del Bataclan y presidente de la asociación de víctimas Life for Paris. “Tenemos ganas de que comience, aunque con esta pregunta: ¿cómo será durante nueve meses?”.
A las 12:30, hora de Francia, 7.30 en Argentina), este inédito proceso inició sus sesiones en una sala expresamente habilitada en el Palacio de Justicia de París, aunque las primeras jornadas están destinadas a la constitución de las partes civiles, casi 1.800.
Gendarmes trasladan a Salah Abdeslam desde la cárcel a los tribunales. Foto: AP
Todo ello entre fuertes medidas de seguridad en un contexto de “riesgo” de amenaza terrorista, apuntó el portavoz del gobierno Gabriel Attal a la cadena France 2. En 2020, durante el juicio de los atentados de Charlie Hebdo en enero de 2015, nuevos ataques golpearon Francia.
“Toda Francia mirará este juicio, todo el mundo mirará este juicio”, aseguró el lunes el ministro de Justicia, Eric Dupond-Moretti, al visitar la sala de vistas. Aunque todas las miradas estarán puestas en Abdeslam.
Este joven de 31 años, otrora un juerguista que cometía delitos menores antes de convertirse al yihadismo, es el único sobreviviente de los comandos que atacaron París, el “décimo hombre”, y el juicio deberá esclarecer su papel exacto.
“Velaremos por que este juicio excepcional no se convierta en un juicio de excepción”, advirtieron sus abogados. Doce de los 20 acusados se enfrentan a la cadena perpetua por esta noche de horror que comenzó poco después de las 21.15 en Saint-Denis.
En ese momento, un atacante suicida activó sus explosivos cerca del Estadio de Francia, donde tenía lugar un partido amistoso de fútbol entre Francia y Alemania, con miles de personas en las gradas, entre ellos el entonces presidente François Hollande.
Dos kamikazes más siguieron minutos después provocando la muerte de un conductor de autobús. Abdeslam también debía volarse pero acabó huyendo a Bélgica, porque, según los investigadores, su cinturón de explosivos era defectuoso.
A continuación, en el centro de París, dos comandos de tres hombres cada uno dispararon contra terrazas de bares y restaurantes y balearon a los asistentes a un concierto en el Bataclan, donde las fuerzas del orden lanzaron un asalto pasada la medianoche.
El saldo del peor ataque en París desde la Segunda Guerra Mundial fue de 130 muertos y más de 350 heridos, en un momento en que una coalición internacional luchaba contra el EI en Siria e Irak y miles de sirios buscaban llegar a Europa huyendo de la guerra.
La investigación
Cuatro años de investigación permitieron reconstruir gran parte de la logística de los atentados y del recorrido que siguieron los miembros del comando: por un ruta migratoria desde Siria hasta sus escondites alquilados en Bélgica y cerca de París.
Los investigadores descubrieron una célula yihadista mucho mayor y responsable también de los atentados que dejaron 32 muertos el 22 de marzo de 2016 en el metro y en el aeropuerto de Bruselas, otro de los ataques que ensangrentaron Europa durante esos años.
“Los sobrevivientes de los atentados del 13 de noviembre tienen la imperiosa necesidad de explicar lo que pasó, lo que sufrieron”, dijo a Le Parisien la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, para quien este juicio les ayudará en “su proceso de reconstrucción”.
Para el antiguo fiscal de París, François Molins, hay que construir “una memoria colectiva reafirmando los valores de humanidad y dignidad” y permitir “a las familias de las víctimas comprender qué ocurrió”, dijo a la radio RTL.
El primer momento importante del juicio comenzará a finales de septiembre con los testimonios de los sobrevivientes y allegados de las víctimas, durante cinco semanas, y sus asociaciones ya advirtieron de la emotividad.
Abogados y partes llegan al tribunal. Foto: AP
“Sentimos que hay angustia (…) Algunos se preguntan qué les pasará cuando vean a los acusados en el banquillo”, indicó Carole Damiani, responsable de una asociación de ayuda a las víctimas, que recibió “numerosas llamadas” en los últimos días.
El interrogatorio de los acusados –seis de los cuales son juzgados en rebeldía– llegará a principios de 2022.