La nena recibió un disparo en el tórax luego de que desde un auto dispararan 32 tiros contra los vecinos. Un joven de 19 años también fue herido. El reclamo de la familia de la víctima
Nayla Naomi Torrila era la menor de cinco hermanos y el próximo 23 de marzo hubiera cumplido 5 años. El martes por la noche, estaban jugando con unas amiguitas en la calle en el Barrio 1-11-14, del Bajo Flores porteño. Su mamá, Alcira, les acababa de pedir a sus hijos que regresen a su casa cuando desde un Renault 19 gris comenzaron a balear a los vecinos. “Empezaron a los tiros como loco”, recordó la mujer. Fueron 32 balazos. Uno de esos disparos mató a Nayla, de apenas 4 años.
Tras el ataque, y aun sin saber lo que le había pasado a su hija menor, Alcira enseguida comenzó a buscar a sus chicos. Así se enteró que Nayla estaba en la casa de una amiga. “Cuando fue mi hermana a buscarla, estaba mi hija tirada en el suelo. Yo la agarro y me fui corriendo al hospital, y se me murió mi hija en mis brazos”, relató la mujer quebrada en llanto en diálogo con Crónica TV.
Alcira habló este miércoles por la tarde mientras sus familiares y vecinos realizaban una movilización en reclamo de justicia sobre avenida Perito Moreno, en inmediaciones del lugar en donde se produjo la balacera. En ese mismo sitio, la semana pasada también se habían realizado una marcha para pedir mayor seguridad en la zona, que es jurisdicción de la Gendarmería.
“Me la arrebataron de mis brazos”, dijo Alcira. “Lo único que quiero es justicia por mi hija”, pidió y, luego, exigió: “No manden gendarmes para nada, lo que queremos es gendarmes para que nos cuiden”.
En tanto, Osvaldo, padre de Nayla, señaló: “¿Entre bandas se enfrentan y tiene que salir perjudicado un niño?”. “Yo quiero justicia para el que bajó, disparó y mató a mi hija”, concluyó el hombre.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que los sospechosos de matar a Nayla serían “una banda de delincuentes argentinos que se dedica a robar, y sin vínculos con los narcos de esa zona”.
El caso
Nayla murió el martes por la noche tras recibir un tiro en el pecho luego de la balacera en el Barrio 1-11-14, donde también un joven de 19 resultó herido en una pierna.
El ataque ocurrió alrededor de las 22, en el cruce de Bonorino y Calle 10, donde, según los testigos, desde un automóvil Renault 19 color gris se efectuaron varios disparos a ocasionales transeúntes. Los peritos levantaron del lugar 32 vainas servidas calibre 9 milímetros.
Según las fuentes consultadas, el personal de Gendarmería apostado en la zona emitió un alerta y le informó a la Policía de la Ciudad que el automóvil de los tiradores había escapado en dirección al vecino Barrio Presidente Illia.
En paralelo, al Hospital Piñero ingresaron Nayla y el joven de 19 años baleados en el ataque. La nena murió y la otra víctima está fuera de peligro.
En la causa interviene el fiscal Eduardo Cubría, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°22, quien investiga el ataque como “homicidio” y dispuso, además, la intervención de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad, para que tome las primeras declaraciones testimoniales en el hospital y en el lugar del ataque.