Nuestra moneda hoy vale centavos comparada con la uruguaya. Los escasos locales que la reciben sólo aceptan billetes de 500.
“Fuimos comprando y ahorrando dólares antes de venir para poder cambiarlos por pesos uruguayos. Hace cinco años que vacacionamos en Punta del Este y sabemos que el peso argentino no tiene valor. Recién venimos de cambiar 100 dólares por 4.390 en moneda uruguaya”, señalan Hugo (56) y Alicia (57), correntinos, en diálogo con Clarín, mientras deciden si se dejan tentar por la oferta de un café con medialunas porteñas que puede leerse en la cartelera de un bar.
Hugo todavía sigue sorprendido por los $ 2.200 que le cobraron en el peaje, pero se relajó y recibió el Año Nuevo con la degustación gastronómica de un restaurant y el espumante en la playa de todos los años.
A ciencia cierta, los argentinos que deciden veranear en las playas de la Península piensan en dólares para no especular el valor de la conversión de una moneda a otra. De hecho, en los comercios ya casi ni se admiten los billetes argentinos, como en años anteriores.
“No estamos aceptando billetes argentinos porque es baja la conversión y su valor es muy inestable”, explican en una clásica cafetería de Punta del Este. Es que la devaluación de la moneda nacional impactó en el valor de los productos y no favorece el tipo cambiario. “Los argentinos prefieren pagar con dólares o con tarjeta de débito porque por ley se les devuelve un porcentaje del IVA”, indica Andrés, cajero de una confitería.
Cuentas frente a la pizarra
Las pizarras de las tradicionales casas de cambio o empresas de servicios financieros muestran la misma fórmula, 0,20 en compra y 0,40 en venta, y toman como marco de referencia el precio del dólar blue.
1 peso uruguayo equivale a 5 pesos argentinos, según la cotización que establece el Banco República, el cual marca el termómetro en el país. Hay una relación de 5 a 1. Por esta razón, los turistas multiplican por cinco. Por ejemplo: los 430 pesos uruguayos que cuesta un plato de rabas se traducen en 2.150 pesos argentinos.
Así, por cada 1.000 pesos argentinos te dan 200 pesos uruguayos o 5 dólares. 100 pesos argentinos se transforman en 20 uruguayos, aunque en el mostrador siempre puede haber una mejor cotización (diferencia) a favor del cliente.
“El billete de $ 100 no tiene ningún valor porque te toman a partir de $ 200 o $ 500”, comenta un viajero. Desde una de las empresas financieras aseguran que el argentino que cambia pesos no supera el 5%.
“La devaluación de los últimos cuatro años del peso argentino contra el peso uruguayo fue de 618% y contra el dólar fue de 995%, según los cierres promedio del Banco Central”, le informa a este medio Waldemar Alvarez, vicepresidente de Gales Servicios Financieros.
Y agrega: “Hay más demanda de pesos argentinos que oferta porque, ahora que las fronteras están abiertas, muchos uruguayos están cruzando el charco para operarse de la vista o por cuestiones laborales que habían dejado pendientes”.
El Túnel es uno de los pocos comercios que admite abonar el consumo con billetes argentinos, pero rechazan los que tengan un valor inferior a $ 500. “Porque en las casas de cambio no los toman. Conviene pagar con tarjeta o dólar”, expresa Fernando, uno de sus mozos.
“Antes de la pandemia, permitíamos que los clientes pagaran con moneda argentina, incluso cuando ya valía menos, porque después nos servía para gastar en Argentina”, manifiesta la empleada de un bar. “Años anteriores valía tres veces menos, pero hoy como 20. Es imposible hacer la conversión”, se suma una comerciante de Avenida Gorlero.
Precios por las nubes
¿Cuánto puede costar un típico chivito para dos personas? 1.240 pesos uruguayos, es decir, 6.200 pesos argentinos. ¿Un café expreso en un bar? 185 pesos uruguayos, o sea, 925 pesos argentinos. ¿Un menú ejecutivo en oferta? 530 pesos uruguayos, o bien, 2.650 pesos argentinos. ¿Un agua mineral? 80 pesos uruguayos, que serían 400 pesos argentinos.
Además de la posibilidad de recibir un booster o tercera dosis de la vacuna, otros de los beneficios destinados a los turistas son la devolución de IVA total en gastronomía, IVA 0 en hotelería y en alquiler de coches, descuento del impuesto a la renta en los alquileres de departamentos y rebaja del 24% en naftas al ingresar en autos por las fronteras. Algunos incentivos para que el tipo de cambio no pegue tanto en el bolsillo.